Marien Riera, directora de contratación de AVASA Travel Group acaba de regresar de un Fam Trip a Maldivas, organizado por el tour operador TUI. El viaje, que ha contado con la participación de ocho agencias del grupo, ha consistido en una ruta por diferentes islas y atolones de este archipiélago para descubrir las maravillas que ofrece este destino. Hoy Marien nos cuenta su experiencia descubriendo este “paraíso azul”.

“Para llegar a Maldivas tomamos un vuelo desde Barcelona a Malé con Etihad Airways, vía Abu Dhabi. Antes de la salida es importante tener en cuenta que como requisito para poder entrar y salir del territorio de Las Maldivas es necesario completar el documento IMUGA (Traveller Declaración).

Una vez en el aeropuerto de Malé, nos estaban esperando l0s representantes de TUI, organizador del viaje, para llevarnos en hidroavión a nuestro siguiente destino, Raa Atoll, concretamente al Hotel Dhigali Maldives 5*, complejo famoso por su exuberante jungla y aguas translúcidas. Este es un destino totalmente recomendable para aquellas personas que busquen tranquilidad, ante todo.

El hidroavión, junto con la lancha rápida son los medios de transporte habituales entre islas, aunque yo recomendaría el primero cuando los trayectos en lancha superen la media hora.

Las dos primeras noches las pasamos en este complejo, donde nos alojamos con el paquete Premium Todo Incluido; desayuno, almuerzo y cena más una selección de vinos premium, licores, minibar y otros pequeños detalles, desde una tarta de cortesía para quienes celebran cumpleaños y aniversarios hasta Kids Club gratuito para niños de 4 a 12 años.

El tercer día salimos de nuevo en hidroavión hasta Malé y una vez allí embarcamos en una lancha rápida en dirección a Rasdhoo Atoll. Allí nos hospedamos en el hotel Kuramathi Maldives 4*. Es el complejo más grande de los que recorrimos, con gran variedad de restaurantes, instalaciones de buceo y snorkel, centro médico con cámara hiperbárica, deportes acuáticos y muchas otras opciones para disfrutar y divertirse.

Nosotros, al viajar en grupo, nos alojamos en una casa en la playa de dos habitaciones, ideal para familias o amigos en pensión completa, pero tienen una oferta de hasta 11 villas/bungalows para poder escoger y diferentes paquetes de todo incluido con una gran variedad de servicios y descuentos, pensados para contentar a todo tipo de viajeros. 

Nuestra siguiente parada fue el Hotel Kurumba Maldives 5*, en North Male Atoll. Este fue el primer complejo turístico de Las Maldivas, que abrió sus puertas el 3 de octubre de 1972 y que lleva funcionando desde entonces.

Se trata del complejo más cercano a Malé, a tan solo 10 minutos en lancha rápida, y que se define como una isla cosmopolita dentro de las Maldivas. Este es un lugar muy versátil, ya que es perfecto para viajeros business, eventos sociales, escalas de entrada o salida a Maldivas y ¿por qué no? para pasar unas vacaciones fantásticas, ya que es un establecimiento genial en todos los aspectos.

Nuestro viaje finalizó en Velassaru Maldives- Luxury Resort, situado en el atolón sur de Malé donde pasamos nuestras últimas dos noches en estas islas paradisíacas.

Aquí tuvimos la suerte de alojarnos en una de las 24 water villas sobre el agua con hermosas vistas a la laguna, pero el resto de sus alojamientos son igual de perfectos para tener una estancia inolvidable en un complejo equipado con todo lujo de detalles, 5 restaurantes y 2 bares con sabores gourmet, y múltiples opciones para realizar actividades acuáticas. Desde aquí realizamos una salida en un dhoni (una embarcación tradicional de madera), para poder ver el atardecer desde el mar.  ¡Toda una experiencia!

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